El Ministerio de Defensa de Israel confirmó que el sistema Iron Beam, un láser terrestre de alta energía diseñado para interceptar cohetes, morteros y drones, entrará en servicio antes de fin de año. Tras semanas de ensayos en el sur del país, el sistema demostró capacidad de derribar amenazas en segundos y en distintos escenarios operativos.
Desarrollado por Rafael Advanced Defense Systems junto a Elbit Systems, el Iron Beam complementará a los ya conocidos Iron Dome, David’s Sling y Arrow, que han protegido a Israel de miles de misiles lanzados desde Gaza, Líbano y Yemen. La novedad es que, a diferencia de los interceptores tradicionales, el láser no consume misiles ni proyectiles, sino energía eléctrica.
Cada misil interceptor cuesta alrededor de US$ 50.000 dólares, mientras que el disparo de un láser es prácticamente gratuito. Esto promete una defensa más sostenible frente a ataques masivos de bajo costo, como enjambres de drones o ráfagas de cohetes
La tecnología detrás del láser
El Iron Beam utiliza un láser de clase 100 kW, con óptica adaptativa para mantener el haz estable incluso a larga distancia. Puede actuar en un radio de hasta 10 km, neutralizando proyectiles al calentarlos hasta desintegrarlos en pleno vuelo. Esta velocidad de reacción, sumada a su bajo costo por uso, representa un cambio de paradigma en la guerra moderna.
Según Amir Baram, Director del Ministerio de Defensa, es la primera vez que un láser de alta potencia alcanza plena madurez operativa en el mundo. Yuval Steinitz, presidente de Rafael, lo calificó como un “game changer” con impacto inédito en los conflictos futuros.
Los primeros sistemas se integrarán a la defensa aérea israelí este mismo año. En paralelo, Elbit desarrolla variantes como un láser aerotransportado y versiones navales y móviles, capaces de ofrecer cobertura flexible en distintos escenarios.
De confirmarse su despliegue masivo, el Iron Beam marcará un antes y un después: un sistema que convierte la energía eléctrica en defensa inmediata, barato de operar y con capacidad para redefinir el equilibrio entre ataque y protección en los cielos del siglo XXI.
Tal vez te interese: SpaceX lanza un misterioso satélite para Israel a la órbita geoestacionaria